Tucumán, escenario de emociones que se reflejan el videoclips

Tucumán, escenario de emociones: tres videoclips que capturan la magia de la tierra: Con paisajes que parecen pintados a mano y con su esencia vibrante que late en cada rincón, Tucumán se erige como un pequeño universo de belleza infinita. Desde montañas que rozan el cielo hasta selvas que respiran historia, pasando por ríos, campos y ciudades cargadas de cultura, esta tierra ofrece escenarios naturales que invitan a soñar. No es casualidad que tantos artistas hayan encontrado en el “Jardín de la República” el telón perfecto para sus historias: Tucumán, con su magia discreta y su luz única, conquista cámaras y corazones.

“El Jardín de la República” no es sólo una frase hecha para Tucumán. Es un símbolo vivo de su diversidad: 22.592 kilómetros cuadrados donde bosques, espejos de agua, cerros majestuosos, fértiles campos y modernas ciudades conviven en perfecta armonía. Esa riqueza natural y cultural no pasa desapercibida para los músicos, que una y otra vez eligen esta provincia como escenario para dar vida a los videoclips que acompañan sus nuevas canciones. Te compartimos tres videoclips musicales que tuvieron a Tucumán como escenario.

  • Día Cero (La Oreja de Van Gogh)

En 2012, tras el exitoso lanzamiento de Cometas por el cielo —el tercer disco de La Oreja de Van Gogh con su nueva vocalista, Leire Martínez—, la banda fue invitada a registrar una versión en vivo del álbum acompañada de un DVD. El material fue filmado entre México y Argentina; y por su valor histórico, natural y cultural, en nuestro país el escenario elegido no podía ser otro que la majestuosa Ciudad Sagrada de Quilmes. Allí se rodó el documental de una hora de duración, que recorre los grandes éxitos del grupo, y también el videoclip de “Día Cero”.

“Día Cero” fue el corte de difusión del álbum y, en su videoclip, retrata el viaje de la banda desde su llegada al aeropuerto Benjamín Matienzo hasta su paso por los imponentes Valles Calchaquíes. Además de capturar el detrás de escena de la grabación y la interpretación en vivo del tema, el video logra algo aún más poderoso: inmortalizar la belleza infinita de nuestros valles, donde los verdaderos protagonistas son las montañas eternas y los cardones milenarios que escoltan el paisaje.

https://www.youtube.com/watch?v=nVCJ0wyw1ZA

  • No hay más nada (Los Totora)

En 2015, la banda platense Los Totora presentó “No Hay Más Nada”, el primer corte de difusión de su álbum Cuestión de Tiempo. Para darle vida a esta canción, eligieron como escenario la belleza natural de Tafí del Valle. Durante tres intensos días de rodaje, grabaron un videoclip cargado de calidez y emoción, que cuenta una historia simple y entrañable: la de una niña lugareña que, a través de un mensaje por Facebook, invita al grupo a tocar en su fiesta de cumpleaños.

El videoclip, filmado entre el 7 y el 9 de septiembre, no sólo muestra la frescura de Los Totora, sino también la magia de los paisajes tucumanos, con sus cielos abiertos y su verde vibrante. Modelos locales como Lucía Rossi, Daniela Ruíz y Belén Dupuy también participaron del rodaje, que estuvo marcado por el buen humor y la amabilidad de los artistas. Más que un simple video musical, No Hay Más Nada es un homenaje a la conexión humana, a la música compartida y a la belleza de nuestros valles.

https://www.youtube.com/watch?v=Gyy7_E1_i3c

  • Cáctus (Abel Pintos)

También en 2012, Abel Pintos soñó en grande: repasar los momentos más importantes de su carrera en un álbum y DVD únicos, Sueño Dorado. Para darle vida a este proyecto tan personal, eligió un escenario imponente: la Ciudad Sagrada de los Indios Quilmes, en Tucumán. Allí, en un amanecer cargado de mística, con el sol pintando de oro las piedras milenarias y los cerros, grabó un concierto íntimo acompañado sólo por sus músicos y por la energía ancestral del lugar.

Dentro de ese proyecto, “Cactus” —una versión sentida del tema de Gustavo Cerati— se convirtió en el primer corte de difusión. El videoclip captura la quietud solemne de las ruinas, la emoción contenida en cada acorde y la conexión profunda entre el artista y el paisaje. Filmado en plena naturaleza y en absoluta soledad, con un equipo técnico de más de 50 personas y el apoyo de la comunidad indígena, “Cactus” es más que una canción: es un instante suspendido en el tiempo, donde la música y la tierra se funden en un mismo latido.

https://www.youtube.com/watch?v=BeGF40RMf9A&t=4s